INTRODUCCIÓN
Crear un álbum ilustrado sobre el universo de Sillmarem es un paso más para dar vida, forma, color y rostro a los diferentes personajes, culturas y paisajes que pueblan y enriquecen este amplio universo literario de ficción. Es aquí cuando entra en acción el fascinante trabajo creativo de los ilustradores cuyo trazo, fondo, volumen e imaginación nos ayuda a sumergirnos y descubrir nuevos matices tan inesperados como fascinantes.
Tanto Amaya Díaz como MCruz, han sabido cumplir este objetivo con sencillez y buen gusto. Júzguelo el lector por sí mismo.
¿QUÉ ES SILLMAREM?
Sillmarem es un mundo marino descendiente de la tierra, el cual se guía por el principio al respeto de toda forma de vida, permanece oculto y nadie sabe cuál es su localización exacta.
La trama comienza cuando un enigmático aristócrata, El señor de Ekatón, inventa la fórmula de un poderoso elixir (el elixir de Vitava) capaz no solo de otorgar la vida eterna sino grandes poderes a quién lo ingiera.
A partir de este punto se inicia una desesperada carrera para adueñarse del elixir, planteándose la paradoja de si es lícito y moral, perder la humanidad personal, para salvar la humanidad del resto de seres humanos…
LOS ILUSTRADORES EN LA CIENCIA FICCIÓN
(PERCEPCIÓN VISUAL)
Declaración de principio: para mí la ciencia ficción es un inapreciable instrumento para comprender un poco mejor el mundo que nos rodea. No sólo transmite los conocimientos más actuales de la ciencia (sea cual sea su rama), si no las posibles aplicaciones que se puedan obtener de los mismos, en un futuro no muy lejano. Eso sí, siempre de una forma entretenida, cumpliéndose la máxima: no hay nada mejor como aprender divirtiéndose.
La ciencia ficción se centra en la causa y efecto de un nuevo descubrimiento o creación científica. Creando la hipótesis, en el caso de que existiese o viese la luz, ¿qué sucedería? y ¿cómo nos afectaría a los seres humanos?
La ciencia es la encargada de los pasos intermedios, es la que posee los recursos tanto humanos, económicos como técnicos para lograr determinado fin: un nuevo hallazgo o invento. Pero para que estos factores se unan, permitiéndonos entender nuevos conceptos y conocimientos científicos de una forma fácil, es tan necesario como útil usar los ingredientes inherentes al cerebro humano. Nuestra capacidad de crear, unida a nuestra capacidad de preguntarnos el porqué de las cosas (como funcionan y como son).
Desde el amanecer de los tiempos, el hombre de una manera u otra, por un motivo u otro, ha ejercido la capacidad de pensar por sí mismo, asimilando, adaptándose y comprendiendo la realidad. Usando en dicho proceso nuestros sentidos. La vista, oído, tacto, gusto y olfato, al que yo me atrevería a añadir otro más, el de la imaginación aplicada.
Ya sea para crear fuego con dos ramas, como para fabricar una caña de pescar, una herramienta para pelar la fruta, un arma para cazar, un símbolo o conjunto de signos para comunicarse, o una imagen para dar a entender o transmitir una idea o concepto.
Es aquí donde entra el ilustrador en la ciencia ficción. Proyectando, complementando y ampliando en imágenes, lo que una idea escrita trata o intenta dar a conocer o expresar. Desde las deidades del antiguo Egipto, pasando por los tapices cristianos medievales, los murales renacentistas o cuadros impresionistas del 19, desembocando en la tecnología digital más actual, los videojuegos, comics, story board, cortometrajes, videoclips,... podemos comprobar cómo el arte de ilustrar ha evolucionado con el ser humano, transmitiendo las ideas con una variedad de recursos y métodos tan amplios como su imaginación. Me gustaría recordar que la belleza es siempre belleza, cualquiera que sea el medio para expresarla. Palabras, imágenes, sonidos, esculturas, aromas, sabores o movimientos. Sintetizando, el ilustrador nos permite no sólo explorar, si no viajar más allá de nuestra realidad cotidiana, ya sea pasada, presente o futura.
Desde los primeros comics de Marvel, Vértice y muchos más, pasando por la animaciones de dibujos japoneses, Mazinger Z, Comando G, Ulises 21, hasta la obras de arte actuales como Akira, Ghost in the Shell 1 y 2, Appleseed, Steamboy o Final Fantasy 7 Advent Children, por citar algunos ejemplos.
Sin ignorar el mundo del cine que ha evolucionado desde 2001 odisea Espacial, el mítico Stars Wars, Alien, Blade Runner, Matrix... Desde luego hay más títulos y obras maestras. Impactantes en verdad son las ilustraciones creadas en los 70, con aerografía, de H. R. Giger creando un antes y después en nuestra percepción visual de la ciencia ficción. Obras como Biomecanoide, Necronimicon o Lily sientan un precedente difícil de olvidar. O con las magníficas ilustraciones y decorados de Syd Mead, en Blade Runner, considerados por muchos como la película más lograda de la ciencia ficción actual.
Para finalizar recomiendo que visitéis la página de cgsociety.org donde se muestran trabajos de los mejores ilustradores de todo el mundo, donde se comparten e intercambian ideas, sugerencias y opiniones. Personalmente, no concibo un auténtico mundo de la ciencia ficción, de lo que es y lo que puede ser, sin la inapreciable capacidad visual de sus ilustradores, que no es otra que invitarnos a ir un pasito más allá de nuestros límites personales. Sin lugar a duda, todo un logro.
Gabriel Guerrero Gómez
Artículo publicado en el año 2009, en la columna "Explorando el futuro", del diario digital "El Heraldo del Henares". También incluido en el título: "Explorando el Futuro".
ISBN: 978-84-615-7091-1
No hay comentarios:
Publicar un comentario